La seguridad jurídica es clave para un crecimiento empresarial sostenible

Para comenzar a hablar del tema, es necesario definir seguridad jurídica en términos empresariales y todos los aspectos que abarca.

La seguridad jurídica constituye el marco legal que protege los derechos de la empresa y garantiza el cumplimiento normativo (laboral, fiscal, ambiental), favoreciendo la protección patrimonial y la información veraz que impulsa a su vez, la inversión y el crecimiento empresarial.

Como podemos ver, cuidar el cumplimiento normativo y proteger los derechos de la empresa, proporciona certeza jurídica, sin embargo, en la práctica, muy pocas empresas están al día en este tema.

Construir empresas con base legal

Las empresas que más carecen de seguridad jurídica, por lo general, son las familiares, donde se observan prácticas que las perjudican. Como ejemplo, tenemos la falta de cumplimiento en aspectos legales en varias áreas: contratos con los empleados, proveedores y clientes, contabilidad que no está actualizada, atención a las pólizas de seguros, marcas no registradas, entre otras.

Siguiendo con las empresas familiares, también vemos que se mezclan gastos personales con gastos de la empresa, lo cual la va descapitalizando y poniendo en riesgo.

Con todo lo anterior, se hace imprescindible poner atención a este importante tema para proteger a la empresa, brindándole confianza al operar y dándole un mayor control de sus recursos para así lograr un crecimiento sostenible y seguro a largo plazo.

Algunas recomendaciones que me permito hacer para tener seguridad jurídica en las operaciones de la empresa, son las siguientes:

1. Tener una estructura basada en organigrama actualizado, funciones definidas por puesto, procesos claros, políticas y un reglamento interno de trabajo que ayuden a minimizar los riesgos de operación.
2. Separar el flujo de la empresa de los gastos personales, estableciendo sueldos adecuados a los dueños y miembros de la familia.
3. Mantener contratos actualizados de colaboradores, clientes y proveedores.
4. Cumplir a tiempo con sus obligaciones fiscales y legales pertinentes a su giro.
5. Registrar sus marcas como propiedad intelectual.
6. Proteger los datos personales con la normativa aplicable.
7. Contar con asesoría legal.
8. Mantener actualizados los registros contables y actas.
9. Cuidar la vigencia de sus pólizas de seguro.
10. Concientizar al personal sobre la importancia de trabajar con honestidad y ética.

Construir empresas con base legal

Una vez que logren llevar a cabo cada uno de estos puntos, podrán incrementar la certeza jurídica para sus empresas y crecer de una forma sostenible y segura.