Tener un estilo de vida saludable es indispensable para nuestro bienestar y calidad de vida, por lo que educar en hábitos saludables desde la infancia es lo ideal, ya que es la etapa donde los niños muestran curiosidad y adquieren buenos hábitos y costumbres que determinarán en gran medida su salud y comportamiento presente y futuro.
Actualmente las estadísticas de obesidad en México son alarmantes, pues nuestro estilo de vida hace que recurramos a alimentos procesados en lugar de alimentos naturales. Además, la falta de tiempo y el cansancio hacen que no siempre realicemos actividad física y que los niños pasen horas frente a la televisión, videojuegos o celulares.
Los hábitos saludables dependerán de nuestra propia educación y costumbres. En general, cuando hablamos de salud, inmediatamente pensamos en la alimentación, la higiene y el deporte, sin embargo existen otros hábitos relacionados con la salud mental, como evitar situaciones de estrés, favorecer un descanso adecuado o establecer relaciones sociales.
Si deseamos que los niños aprendan a llevar un estilo de vida saludable, debemos empezar por predicar con el ejemplo y practicar aquello que queremos inculcarles, por ejemplo:
- Establecer horarios fijos de comidas con una alimentación variada y equilibrada, e incluso hacerlos participar en la elaboración y preparación de los alimentos.
- Procurar comprar solo alimentos saludables, así cuando quieran comer algo, solamente tendrán alimentos que les ayuden a mantener su salud.
- Volver cotidiana la actividad física: sacar a pasear al perro, dar un pequeño paseo, ir caminando a ciertos lugares, son pequeñas actividades que suponen poco esfuerzo y aportan un enorme beneficio para la salud.
La adquisición de hábitos saludables desde la infancia es una inversión en la salud de los niños. La infancia, con su curiosidad innata y su capacidad de aprendizaje, es la mejor etapa para enseñarles a llevar una vida sana y equilibrada tanto física como mental y emocionalmente.