Los empresarios, profesionistas y emprendedores, deberíamos de aprender de Isaac Newton: su curiosidad por el entorno pero, sobre todo, su capacidad de acción para analizar y reconocer los acontecimientos que le rodean y aplicarlo en conocimiento.

Como empresario, ¿qué tanto conoces tu entorno, tus clientes, tu mercado, las necesidades de tu comunidad?, ¿cómo aprovechas tus conocimientos, productos o servicios para satisfacer esas necesidades?

Isaac Newton es además reconocido entre muchas otras cosas por sus famosas leyes de la física, ¿te has puesto a pensar que esas mismas leyes pueden aplicarse en tu negocio o proyecto?

Masa, fuerza y movimiento, estos son los elementos sobre los cuales se basan las leyes de Newton, empecemos por asignarles un significado a cada palabra:

Objeto = Negocio / empresa / proyecto.

Fuerza = Capital / equipo / colaboradores.

Movimiento = Trabajo / acción / capacitación.

Ahora analicemos como podemos aplicar cada una de las leyes en nuestros proyectos o negocios.

Ley de la inercia: un objeto seguirá en reposo o movimiento hasta que se aplique una fuerza externa.

Toda idea que tengas no pasará de eso: “una idea”, hasta que pongas manos a la obra para desarrollarla y ejecutarla. De igual manera, todo negocio o proyecto no pasará del papel o de un gran pensamiento si no lo compartes y empiezas a tomar las acciones con tu equipo de colaboradores para llevarlo a cabo.

¿Cuántas ideas se han quedado en el tintero, porque decides mantenerlas en reposo?

Ley de la dinámica: una fuerza externa que actúa sobre un objeto causará una aceleración en la misma dirección y fuerza.

Tu negocio o proyecto se encaminará solamente en el sentido que tú decidas, ¿tienes clara la dirección y la meta a donde lo quieres llevar?, ¿tus objetivos son claros y todo tu equipo los conoce, saben hacia dónde van?, ¿tus decisiones son congruentes con el camino trazado?

El tiempo que tardarás en llevar a la meta tu negocio también dependerá de la fuerza que le apliques. ¿Cuánto tiempo le dedicas a tu proyecto?, ¿de cuánto capital económico dispones?, ¿quiénes son los colaboradores que te acompañan y le dan impulso adicional al proyecto?

Ley de acción y reacción: toda acción genera una reacción igual, pero en sentido opuesto.

Todo negocio o proyecto al iniciar, genera situaciones de riesgo, conflicto, competencia, obstáculos que se van encontrando en el camino y que pueden frenar o truncar nuestro sueño. ¿Tienes claros los riesgos que se pueden presentar?, ¿tienes un plan B o C para sortear los obstáculos que se te puedas encontrar?, ¿estás listo para enfrentarte a la competencia?

Creo que tenemos mucho que aprender de Isaac Newton, pero para mí la mayor enseñanza de este gran científico es la de estar atentos a lo que sucede a nuestro lado. Nunca sabes cuándo te caerá una manzana en la cabeza para descubrir algo grande.

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