Gualberto Vargas, también conocido como “El Salvaje” por su manera de correr, es un ex maratonista que guarda una historia inspiradora. De origen humilde, vio en el atletismo la puerta hacia el éxito, y así fue. Representó a México en diversas competencias internacionales, llevando con gran orgullo nuestra bandera, pero sobre todo a su familia en mente. Ahora, con su equipo de corredores llamado Los Salvajes, transmite su pasión por el deporte a las nuevas generaciones.
¿Cómo se presenta el atletismo en tu vida?

El atletismo llega a mi vida para darle un cambio radical a mi persona y a mi familia. Tener la posibilidad de ofrecerles una mejor vida de la que yo tuve a mi esposa y a mis hijos se convirtió en una metaque me llevó a luchar y trabajar para lograrlo.

¿Cómo fue tu primera competencia profesional?

Para el año 2004 corrí profesionalmente un maratón internacional en Mazatlán. Yo no iba a correr ese maratón, sin embargo, las circunstancias y el destino indicaron que participaría rompiendo el récord del evento, aún sin ir completamente preparado. Este evento me dio la fuerza y la confianza para representar a nuestro país en diversas competencias en el mundo, abriéndome un nuevo panorama, pues de trabajar en la curtiduría, me convertí en atleta.

Al decidir dedicarte por completo al atletismo, ¿cuál fue el principal obstáculo al que te enfrentaste?

Las personas, incluso mi familia. Les decía que quería vivir del atletismo, y ellos al no tener un referente, no creían posible que del deporte se pudiera salir adelante. Yo simplemente actué, tomé la oportunidad y me dediqué por completo a mi pasión, a pesar de las críticas.

¿Qué ha significado para ti representar a nuestro país en competencias internacionales?

Lo máximo, porque el hecho de ser un corredor nacional y llevar la bandera de nuestro país a otros lugares en el mundo, sabiendo que todo México te respalda, fue un verdadero gozo. No era representar una calle, una colonia, una ciudad o un estado, era representar a mi país, México.

Ahora como ex maratonista, ¿qué te llevó a crear tu propio equipo de corredores y convertirte en entrenador?

Dirigir un grupo de corredores, ha sido muy importante, no solo en la cuestión económica, sino también porque disfruto de transmitir mis conocimientos y experiencias, siempre he pensado que se educa con el ejemplo. Es así que quiero ser para ellos un ejemplo de sueños y de lucha, de que sí se pueden lograr grandes cosas como yo lo hice.

¿Qué son Los Salvajes para ti?

A mí me bautizaron como El Salvaje por mi manera de correr, porque lo hacía con necesidad, tenacidad y lucha. Yo siempre quería ganar las carreras, es por eso que quiero motivar a este equipo, que lo considero una familia, a lograr sus sueños.

¿Cómo te gustaría ser recordado en el futuro?

Me gustaría que la gente me recordara como un luchador tenaz que nunca se dio por vencido y que fue el hambre de darlo todo por su familia lo que lo hizo triunfar en una de sus más grandes pasiones, el atletismo.

¿Qué viene para Gualberto en un mediano plazo?

Seguir preparándome como entrenador y guiar a los jóvenes en este deporte. Además, me gustaría crear una asociación que apoye a personas que tienen problemas de adicciones para sacarlos delante de la mano del deporte, hacerlos personas de bien, triunfadoras.

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