El camino hacia la transformación aduanera en México.
El ámbito arquitectónico del nearshoring ha tenido cambios sustanciales en las aduanas. Hoy en día, las empresas que ubican sus campos tecnológicos, productivos y comerciales lo más cerca a sus mercados meta y de mayor importancia han logrado mejorar la efectividad de sus procesos.
Esto convierte en una necesidad la creación de nuevos complejos arquitectónicos con alta eficiencia para fortalecer la industria y comercio, siendo esencial la cercanía entre las aduanas y los países de interés a través de planes maestros que regulen e integren el terreno urbano.
Aunque ha sido gracias al nearshoring que México se ha convertido en el noveno país con más exportaciones, sus inversiones solo han sido para la industria maquiladora, lo que provoca que tengan clústeres industriales únicamente con bodegas, pero con escasos equipamientos arquitectónicos para el desarrollo.
Por esta razón, es fundamental armar centros de modernización tecnológica con laboratorios de investigación y mejoras que abonen a un mejor desempeño dentro del programa manufacturero. Solo de esta manera, México podrá exportar productos con mayor contenido tecnológico en cadenas de valor, gracias al avance científico y mediante el intercambio internacional derivado de la creación de redes satisfactorias de liderazgo.
Para alcanzar estos objetivos tendríamos que pasar de plantas ensambladoras a centros productivos de innovación tecnológica. Esto requiere de proyectos arquitectónicos que sean modernos, dinámicos y de perfección constructiva, con nuevas áreas para la capacitación, que cuente con una red de científicos y técnicos relacionados con la empresa y vinculados a las aduanas de exportación.
Para México representa un reto obtener mayores utilidades en productos con valor agregado que sean empleados en importaciones de tecnología de punta. Se podría alcanzar si las aduanas reformularan sus procesos facilitando los trámites y agilizando las acciones de logística. Indudablemente, acciones así aumentarían la Inversión Extranjera Directa (IED) y el Producto Interno Bruto (PIB) para hacer frente a la competencia desleal con artículos que ingresan saltándose los lineamientos en los aranceles.
Por eso, tenemos que ir más allá de solo empresas manufactureras de ensamble y replantear las medidas proteccionistas.
En 2023, un reto en materia aduanal fue reducido por AGA de México (Archivo General agrario) que diseñó salas arquitectónicas de escaneo con rayos X que evitan la entrada ilegal de artículos. Otro desafío es el de invertir en equipamientos de seguridad para la infraestructura de puertos marítimos, carreteras y zonas aéreas que protejan el desarrollo tecno-científico y, también, reducir el espacio en trámites obsoletos. Cada una de estas acciones es esencial si se quiere lograr la modernización.
Estos cambios han sido previstos por la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) y la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (ANIERM), lo que puede reducir los tiempos de entrega y así, mejorar las estrategias logísticas. Si consideramos que en México existen 50 aduanas: 17 marítimas, 12 interiores, 19 en la frontera norte y 2 en la frontera sur, siendo su recaudación tributaria la parte central, se puede ayudar al progreso de valor agregado con innovación a productos y procesos de manufactura a través de nuevos complejos arquitectónicos con conectividad aduanera.