Estas mujeres, que alguna vez se sintieron aisladas y fuera de lugar en su entorno inmediato, tienen la posibilidad de mostrar sus fortalezas y vulnerabilidades, encontrando escucha, pero también el impulso para lograr sus objetivos como mujeres emprendedoras y el equilibrio entre sus distintas facetas. Entre las ventajas de estos grupos de mujeres se encuentran:
1. Visibilidad y credibilidad
Es a través de la participación, que se genera un mayor impacto para los gobiernos y los inversionistas interesados. Es importante crear y fortalecer iniciativas que fomenten el empoderamiento de las mujeres emprendedoras, por tal motivo, es importante generar comunidades con este objetivo en común.
2. Oportunidades de networking
Las relaciones que se generan en estos grupos, en los que es frecuente realizar eventos de networking, permiten concretar alianzas con otras empresarias, compradoras o inversionistas. Esto es vital para llevar tu emprendimiento hacia otro nivel.
3. Mayor conocimiento y desarrollo de habilidades
En estas comunidades se llevan a cabo capacitaciones, actualizaciones, paneles, por mencionar algunos, de acuerdo a las necesidades de sus socias y en los que podrás obtener mayores conocimientos y fortalecer tus capacidades para lograr los objetivos y el crecimiento de tu negocio.
4. Inspiración
Una mujer exitosa se convierte en inspiración para su comunidad, eso es innegable. Es por ello que en este tipo de entornos colaborativos, el cúmulo de experiencias de cada una de sus integrantes, te permitirá aprender de los errores y aciertos de tus colegas, pero sobre todo, te humanizará al saber que detrás de cada historia de éxito, hay un camino de trabajo y sacrificios que no ha sido fácil.
Además, de que estos espacios son una fuente inagotable de ideas innovadoras que podrán aplicar en tu proyecto y tú misma podrás compartir, es el lugar donde se cocina el cierre de la brecha de género que lleve a las mujeres hacia una equidad que promueva una mayor participación de las mujeres y genere mayores oportunidades.