Desarróllate para el empoderamiento en equipo
Ser líder es un arte. Cada persona es una pieza con sus características únicas, por lo que no podemos liderar siempre con nuestro estilo, el que tenemos por nuestra personalidad. Todos somos distintos y para quienes lideramos equipos, debemos saber cuál es el mejor estilo para cada uno de nuestros colaboradores y utilizarlo.
Cabe resaltar que no es tarea fácil, porque nos obliga a tener un gran autodominio para que no nos gane la inercia de nuestra personalidad. Esto es a lo que yo llamo autoliderazgo. Es así, que de estar al frente de un equipo, necesitaremos desarrollar habilidades blandas tales como:
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- Inteligencia emocional.
- Claridad conceptual.
- Visión y enfoque a resultados.
- Comunicación asertiva.
- Toma de decisiones efectivas.
- Negociación y manejo de conflictos.
- Gestión adecuada del tiempo para incrementar nuestra productividad.
- Desarrollo de equipos de trabajo, entre otras.
El objetivo de todo líder es lograr las metas organizacionales y del área con el equipo de trabajo, lo cual implica un gran compromiso de ambas partes, sin embargo, nos enfrentamos a varios retos:
- Cada miembro tiene una personalidad definida y, por tanto, habilidades inherentes a ella. Así que no necesariamente son todas las que requiere para desarrollar su puesto.
- Generar credibilidad en el equipo para que confíe en el líder y entonces sí pueda influenciar y lograr que el equipo realice sus actividades con calidad y productividad.
- Fomentar un clima laboral que facilite las interacciones entre los miembros del equipo y puedan trabajar de manera coordinada.
Para poder enfrentar estos retos y llevarlos a un buen resultado, te comparto algunas sugerencias para que puedas lograrlo:
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- Conocer la personalidad y comportamientos de cada miembro del equipo para tener empatía y crear canales de comunicación y seguimiento más efectivos, así como poder colocarlos en el puesto correcto donde sus habilidades naturales florezcan más y, si le faltan algunas, capacitarlos en ellas.
- La credibilidad del líder es directamente proporcional al nivel de influencia que tiene sobre su equipo, por lo que debe ser coherente entre lo que dice y hace para ganarse su confianza y, sobre todo, actuar siempre con el ejemplo.
- Crear mecanismos para generar un sentido de identidad y pertenencia en cada miembro del equipo a fin de crear un ambiente adecuado para desempeñar sus funciones.