El 2022 trae una arquitectura femenina altamente cooperativa, solidaria, comunitaria y sustentable en universos compartidos, que solo las mejores arquitectas mexicanas del siglo XXI pueden traer.
Tal es el caso de la Arq. Gabriela Carrillo, que desarrolla la estación Xcán del Tren Maya, en el corredor ecológico de madera de planos inclinados y un gran ojo al cielo de intención comunitaria; la Arq. Magui Peredo, quien trabaja el método y la teoría bajo la etnografía del lugar, como base en el Hotel Punta Caliza en Holbox, donde el agua y las techumbres mayas milenarias resucitan, y la Arq. Marcela González, que trabaja una arquitectura sustentable de integración en ecosistemas.
Fotografía: Tren Mava en Nuevo Xcán vía Twitter por @TrenMayaMX
Las arquitectas artistas y conceptuales como Rozana Montiel, cuya exposición en San Idelfonso busca resignificar la hoja en blanco conjugada con el vacío y la nada; Frida Escobedo, que revitaliza la tallera de Siqueiros abriendo los murales a la plaza pública y la integración de geometría, luz y agua en el Serpentine Pavilion de Londres, y Gabriela Etchegaray como curadora del Pabellón de México en la Bienal de Venecia. En la arquitectura de interiores, la Arq. Lorena Vieyra y la Arq. Andrea Cesarman desarrollan espacios de flujos con atmósferas de bienestar para el espíritu.
Fotografía: Mark Hazeldine Photography
Por otra parte, las arquitectas consolidadas como Fernanda Canales, diseñando el Centro Cultural Elena Garro y su participación en la 17 Bienal de Venecia 2021, así como Tatiana Bilbao que expone en el Architekturzentrum Wien en Viena en el 2022, donde se presentan una veintena de sus proyectos que van de la Ruta del Peregrino a su Jardín Botánico, además de fungir como presidenta del Premio Mies Van de Rohe de Arquitectura Latinoamericana.
Fotografía: Sandra Péreznieto / ArchDaily México