Cuando de invertir se trata, la gente siempre busca seguridad en todos los aspectos, pero también gusta de tener las mejores opciones en ganancias. El problema es que seguridad y rendimiento no siempre van de la mano, pues para ganar más se necesita dar brincos de una zona de conocimiento a la zona de exploración.
Es muy sabido que las bolsas de valores llevan un ritmo muy acelerado e incluso se dice que sus movimientos nos anticipan hasta seis meses de lo que puede ocurrir o sentirse en los datos económicos. Esto nos permite tener una visión al futuro para tomar decisiones incluso en nuestros negocios. Te comparto algunos puntos importantes a considerar:
Adáptate a las necesidades actuales
Aunque el 2020 ha presentado complicaciones en todas las economías y bolsas de valores, el sector tecnológico y salud son los que han sobrellevado mejor la situación. Seguir haciendo negocios por medios tecnológicos mantienen una sana distancia y han resultado en muchos casos incluso más eficientes.
Toma de oportunidades
Las crisis para algunos resultan en oportunidades para otros. En los mercados bursátiles las crisis han servido para renovarse, pues surgen nuevos participantes, y aquellos que no traen números sanos tienden a caer. Esto nos enseña que llevar protocolos en un negocio es importante, pero adaptarte a los cambios de necesidades también. Tu negocio no puede ser ni muy cuadrado, ni muy asimétrico.
Innovar y escuchar
Tener la mente y las manos listas para el cambio, hoy es una característica de alto valor. Los medios de comunicación han acelerado el ritmo de vida incluso de los negocios. Escucha a tus clientes y/o prospectos, ellos te dirán el producto o servicio que hoy se necesita más.
Evita caer en pánico
Así como en las inversiones debes confiar en una estrategia bien planeada, en los negocios ocurre lo mismo. Se vale hacer ajustes de adaptación, pero un buen plan de negocio se debe ejecutar con mente fría.
Disciplina
Las operaciones en bolsa de valores tienen un horario acotado que termina a las 3 de la tarde, el resto del día lo puedes usar para planear más que para ejecutar. Lo mismo pasa con tu negocio, respetar los tiempos de trabajo y tus tiempos personales, hará que tu proyecto de emprendimiento lleve un ritmo sano.
