Por Elhier Cinta
Cuando estamos felices escuchamos la música y cuando estamos tristes, la letra.
Cuando el día nos trata bien y disfrutamos de nuestras actividades laborales o familiares, por lo general la música no puede faltar, y aunque estemos solos, acostumbramos a poner canciones que se identifiquen con nuestro momento.
Tenemos vacaciones, cerramos una venta, hoy vemos a nuestras pareja, hay reunión con los amigos del jueves, nos subieron de puesto, por mencionar algunos ejemplos, son la excusa perfecta para escuchar música afin que sellé nuestro momento y por lo general es música alegre, bailable o bien que podamos cantar a todo pulmón.
Por otro lado, estamos enamorados y no somos correspondidos, nos fue mal en el trabajo, falleció un ser querido, se nos perdió nuestra mascota, entonces buscamos canciones con una letra a la que ponemos toda nuestra atención y vamos empatando cada frase con cada momento de nuestra vida real, que por lo general son temas de acordes tristes.
Pero, ¿qué pasa con aquellos momentos donde nos sentimos tranquilos y en paz?
Es decir, una sensación de equilibrio en nuestra vida y con mente despejada y lista para tomar las mejores decisiones en ese estado emocional, ¿qué tipo de música buscamos en esos momentos?
La música que fluya, que nos relaje y no nos exija pensar más allá de lo que sentimos, música que no nos obliga a resolver una situación de manera inmediata y nos ayuda a ser objetivos y precisos, ¿mi recomendación?
La mezcla perfecta del sonido de la lluvia con jazz: rainy jazz.
Elhier Cinta
Diputado Federal por Guanajuato.
Instagram @elhiercinta