Dr. Salvador Zermeño Méndez
Los arquitectos generan patrimonio y plusvalía en tus inversiones, contratar al arquitecto incorrecto puede depreciar el valor de tu patrimonio, además de no resolverte ningún problema y por el contrario generar muchos más.
El buen arquitecto te va a diseñar una arquitectura con espectacularidad, usos diversos para tener alternativas de negocio, además de que sea útil, bella y justa socialmente para ayudarte a ti a crecer exponencialmente como persona. Toma en cuenta de que si está posicionado con su marca, utilizará una estrategia de marketing efectivo, enviando mensajes claros de tu negocio a través de una súper arquitectura.
La profesión de arquitecto requiere de una gran experiencia, actualización y capacitación constante para toda la vida, lo que un arquitecto joven es difícil que tenga. Por lo tanto, es recomendable revisar lo siguiente:
1. Trayectoria del arquitecto y su tiempo de ejercicio profesional, ya que los grandes arquitectos inician sus grandes proyectos a partir de los 50 años.
2. Checa su página web, ahí te darás cuenta si el arquitecto es visible en redes y su currículo es memorable.
3. Además de checar su visión, misión y filosofía, checa su historia personal, la confianza, beneficios, sueños y valores que aporta a sus clientes.
4. Verifica qué es lo que hace, cómo lo hace y en qué es diferente de cualquier arquitecto de su competencia y en su nicho qué beneficio aporta en materia financiera.
5. El arquitecto barato no especializado no te conviene, busca el más auténtico y creativo, con ideas valiosas y de negocio, ya que puede posicionarte en el mercado, si se trata de arquitectura comercial o incrementar el valor de tu patrimonio, dándole un poder simbólico.