Por Lorena Tobías
En la actualidad, la tendencia va a que nos inclinemos más a elegir productos naturales que nos ayuden a lidiar con ciertas características o padecimientos a los que nos enfrentamos en nuestra vida diaria a causa del estrés.
¿Qué estresa a nuestro cuerpo? Son diversos los factores, pero entre ellos están enfermedades, agentes ambientales, psicológicos, mala alimentación, malos hábitos, falta de sueño, miedo, ansiedad, ira, medicinas, estar lejos de la naturaleza, entre otros.
De un tiempo para acá hemos escuchado de manera más frecuente la palabra adaptógenos pero, ¿realmente sabes lo que esto significa? Pues bien, de manera sencilla los adaptógenos son sustancias naturales ya sean plantas, frutas u hongos que nos ayudan a sanar y prevenir efectos del estrés entre otras características.
Es increíble como estas sustancias naturales llamadas adaptógenos primero tuvieron que ayudarse a sí mismas creciendo en condiciones complicadas y de esta manera fueron desarrollando características que las ayudaron a adaptarse y lograr sobrevivir. Esas particularidades de adaptación son las que nos ayudan a nosotros.
Existen muchos adaptógenos, pero entre los más conocidos se encuentran: ashwagandha, cordyceps, lion mane, reishi y rhodiola. Cada adaptógeno tiene diferentes beneficios y propiedades, pero en general, nos ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, aumentar la resistencia a diferentes tipos de estrés (físico, biológico, emocional, ambiental), restaurar la energía física y mental, así como mantener el equilibrio del cuerpo.
Es importante que sepas que los adaptógenos no se consideran fármacos y tampoco una cura a enfermedades sino un apoyo para nuestro cuerpo.
Existe mucha confusión al mencionar la palabra hongos, sin embargo, los adaptógenos no son drogas ni psicodélicos, son sustancias naturales aprobadas de manera legal como una alternativa medicinal herbal a la salud. Antes de tomar algún adaptógeno pregunta a tu profesional de salud si eres candidato para consumirlos, cuál es tu mejor opción, cuál debes tomar de acuerdo con tu historia clínica y cómo debes tomarlo.
Recuerda que no únicamente por tomar adaptógenos ya estas saludable, tienes que mantener buenos hábitos de alimentación, hacer ejercicio, un buen descanso, meditar y acudir a tus chequeos de salud con profesionales y así tratar de mantener un estilo de vida más saludable y óptimo.