Inquieto y tenaz, es un apasionado de compartir emociones como coleccionista de autos a escala

Emprendedor nato y creador de contenido, es egresado de la licenciatura en Negocios y Sistemas por la Universidad Iberoamericana. Su espíritu dinámico lo ha llevado a reinventarse constantemente, creando diversos negocios como un restaurante de burritos y una tienda de suplementos. Sin embargo, decidió dejarlo todo para convertirse en creador de contenido y explotar su fascinación por el coleccionismo de Hot Wheels, conectando con miles de personas.

¿Qué es lo que más disfrutas hacer de tu trabajo?

La libertad de decidir cómo, cuándo y en qué quiero trabajar. Me encanta poder dedicarme a lo que me gusta, crear contenido con intención y, sobre todo, conectar con más personas que comparten mis intereses.

¿Qué fue lo que atrajo a decidir coleccionar automóviles de juguete a escala?

La posibilidad de imaginar y crear historias con cada auto, además de todas las emociones que me genera, pues cada pieza tiene una vida propia. Comencé porque me hacía sentir como un niño otra vez, lleno de inspiración, entusiasmo y pasión.

¿Cuáles fueron tus primeras adquisiciones?, ¿cómo fue vivir esta experiencia?

Mis primeros autos a escala fueron regalos de amigos y familiares. Aunque eran carritos sencillos, cada uno de ellos me provocaban una emoción enorme. Entonces con el tiempo entendí que no solo eran un juguete, sino el inicio de una colección con mucho significado personal.

¿Qué ha sido lo más inusual que has hecho por obtener una pieza?

Hice un viaje hasta Las Vegas para conseguir una pieza muy especial. Se la compre a Johnny, de El Precio de la Historia. Fue una experiencia única y muy gratificante.

¿Cuáles son tus objetos más valiosos de tu colección?, ¿por qué?

Las piezas más valiosas de mi colección no son necesariamente las de mayor precio, sino aquellas que aprecio profundamente. Vendí muchas piezas de alto valor económico para quedarme solo con las que realmente me gusta y tienen un valor sentimental, pues son de las personas que me las regalan.

¿Cómo seleccionas los automóviles de juguete que vas a agregar a tu colección?

Deben tener algo especial, que cuentan una historia o son diferentes, como un auto clásico o deportivo, o cualquier modelo que despierte en mí una emoción genuina.

¿Cómo te ves en el futuro?

Quiero seguir compartiendo, emprendiendo y viajando. Me gustaría que esta misma pasión la vivan mis hijos, así como en los autos reales.

“Disfruto cada pieza porque sé de la historia y emoción con la que viene acompañada”