A un año de la inauguración, crecen expectativas
Hace unos días platicando con mi prima, trajo a la conversación el tema del Mundial 2026 y el hecho de que a la CDMX le están dando su “manita de gato”. Esto me hizo comenzar a plantearme una vasta variedad de preguntas al respecto, siendo la principal: ¿México está listo para recibir dicho evento?
No me refiero a si hay suficientes hoteles o Airbnb, ni a si las principales zonas turísticas de las ciudades sede ya están quedando aesthetic para recibir a los miles de aficionados. Pienso en cosas como la infraestructura de aeropuertos, transporte, estadios y, sobre todo, en el tema de seguridad pública.
Recordemos que México albergará 13 partidos, de los cuales 5 se llevarán a cabo en Ciudad de México, 4 en Monterrey y 4 en Guadalajara, por lo que cada sede estará prestando sus
más grandes estadios.
El país tiene una gran experiencia como sede de Copas del Mundo. En 1970 y 1986, dejó una huella imborrable en la historia del fútbol. Sin embargo, el Mundial del 2026 será diferente. La ampliación a 48 equipos y la colaboración con Estados Unidos y Canadá implican un gran reto logístico, pero el objetivo es claro: estar a la altura de las expectativas globales.
A un año de la inauguración, los preparativos avanzan en varios frentes, desde la modernización de estadios hasta la mejora de la conectividad, la seguridad y la promoción turística.
Actualmente, el Estadio Azteca está en plena remodelación para cumplir con los estándares de la FIFA. Esto incluye mejoras en accesibilidad, modernización de las gradas y la instalación de tecnología de punta para transmisiones y seguridad.
Por otro lado, el Estadio Akron, hogar de las Chivas, y el Estadio BBVA, base de los Rayados, caracterizados principalmente por su modernidad, están realizando ajustes específicos, como la ampliación de zonas de prensa y la mejora de vestidores. Además, la FIFA ha solicitado campos de entrenamiento adicionales, y ciudades como Zapopan, Pachuca y Toluca podrían sumarse como sedes de práctica.
De igual manera, la infraestructura de transporte es clave. Es así que el gobierno de la Ciudad de México ha anunciado una inversión de miles de millones de pesos para conectar el Estadio Azteca con los aeropuertos internacionales y zonas turísticas. Proyectos como el Tren Interurbano y la ampliación de líneas de transporte público buscan facilitar el traslado de los 6 millones de visitantes esperados durante el torneo.
Un evento de esta índole requiere garantizar la seguridad de jugadores, aficionados y delegaciones. Razón por la que la jefa de gobierno de la CDMX, Clara Brugada, junto con la SEGOB están trabajando en estrategias para blindar las sedes y las rutas turísticas, inspirándose en el modelo de seguridad del Mundial de Qatar 2022.
Finalmente, la Copa del Mundo no solo es una oportunidad deportiva, sino también una turística. La Secretaría de Turismo ha lanzado campañas como “Un Mundo en Sí Mismo”, que resaltan la diversidad del país. Se espera que los aficionados no solo asistan a los partidos, sino que exploren destinos cercanos a las ciudades sede.