El mundo experimenta un constante cambio, y la industria digital se ha visto beneficiada del trabajo de mujeres en todas las áreas del ecosistema digital.
Según datos del estudio Global Gender Gap Index realizado en 146 países, demuestra que, en países como Noruega, Finlandia, Suecia, Alemania y Nueva Zelanda, la brecha de género ha alcanzado un 80%, con relación a años pasados, mientras que, en países de Latinoamérica, la cifra rebasa apenas el 70%. En términos generales, el avance ha sido propiciado por la tecnología y en industrias como la digital se ha visto un avance significativo.
La desigualdad de género es un problema social y la industria del marketing digital ofrece un campo para que las mujeres alcancen su máximo potencial. El estudio Women Marketing Leaders refleja que la presencia de mujeres en el sector digital asciende de forma positiva, especialmente en profesionales de entre 25 a 35 años que están ocupando trabajos en medios digitales, redes sociales y marketing, con un 78%, seguido de mujeres entre 35 y 45 años con un 12%.
Es evidente que la nueva generación está liderando una transformación laboral, en Norteamérica, el 60% de las posiciones relacionadas a marketing digital son representadas por mujeres.
Sin embargo, hay factores como la creación de una familia, que van reduciendo los números de profesionales en el campo, al no poder balancear los tiempos de trabajo con la calidad de vida familiar.
Un 41% de las encuestadas en el estudio anterior revela que la maternidad es un factor que frena el crecimiento laboral, por lo que es imperante ofrecer igualdad de oportunidades, no se debería tener que renunciar a la vida familiar para ocupar puestos directivos o de poder en una empresa, ya que históricamente los hombres no han tenido que hacer este sacrificio.
Estas son algunas medidas que las empresas deben tomar para mejorar el empoderamiento femenino y fomentar la igualdad:
- Asegurar igualdad de condiciones y de pago en puestos con la misma descripción de trabajo.
- Apoyar la flexibilidad laboral y enfocarse a resultados.
- Fomentar el liderazgo y la inclusión.
- Crear una cultura empresarial basada en la compresión intercultural.
- Capacitar a los empleados y dotarlos de mejores herramientas para alcanzar su potencial.