Dolor crónico y dolor neuropático

El dolor es una señal de nuestro cuerpo de que algo puede estar mal. Es una sensación desagradable, y puede sentirse dolor en un área o en todas partes de su cuerpo. Existen dos tipos de dolor relacionados con el tiempo del padecimiento: agudo y crónico. El dolor agudo nos permite atender la señal de alguna lesión o problema de salud que debemos atender.

El dolor crónico puede durar semanas, meses o incluso años. La causa original puede haber sido una lesión, una causa continua de dolor o en algunos casos no hay un motivo claro, persistiendo en el tiempo y pudiendo afectar a diferentes esferas de nuestra vida. Cuando este dolor persiste más de tres meses después de haber cesado la causa desencadenante, se considera dolor crónico y una enfermedad en sí misma.

Desde el punto de vista estadístico, la mayor prevalencia de dolor crónico se encuentra en los adultos mayores, así como también tienen un mayor riesgo de padecer muchas afecciones que provocan dolor. Es algo habitual que los pacientes tengan una o mas enfermedades que causan dolor crónico

¿QUÉ SÍNTOMAS TIENE EL DOLOR CRÓNICO?

El dolor crónico puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo. Este dolor puede atacar a la cabeza, la espalda, las articulaciones, las vísceras internas e incluso, a los propios nervios del sistema nervioso

LOS SÍNTOMAS DEPENDEN DEL TIPO DE DOLOR, SIENDO DIFERENTE SI DERIVA DE:

Dolor osteomuscular.

Los pacientes que sufren dolor derivado de sus músculos, tendones o huesos lo refieren normalmente como opresivo y bien delimitado, pudiendo empeorar con los movimientos y la actividad física.

Dolor visceral.

Suele describirse como un dolor sordo, profundo, mal delimitado y, frecuentemente, asociado a síntomas como náuseas, sudoración, mareos y problemas urinarios.

Sistema nervioso o dolor neuropático

El dolor derivado de la lesión directa sobre uno o más nervios y/o enfermedades del sistema somatosensorial. Se suele describir como pinchazo, punzante o descarga eléctrica, y se acompaña de síntomas como pérdida de sensibilidad (hormigueo) y pérdida de fuerza.

Aparte de estos síntomas físicos y debido a que el dolor crónico puede afectar a la esfera emocional, familiar y laboral, está frecuentemente asociado con síntomas ansioso-depresivos, que es igual de importante tratarlos adecuadamente.

¿CUÁLES SON LAS POSIBLES CAUSAS DEL DOLOR NEUROPÁTICO?

Dolor por herpes (neuritis o neuralgia herpética), diabetes mellitus (neuropatía diabética), neuralgia del trigémino, neuropatías por atrapamiento, lumbalgia, lesión medular, dolor del miembro fantasma, entre muchas otras enfermedades.

¿CUÁL ES SU POSIBLE TRATAMIENTO?

El tratamiento de la enfermedad del dolor crónico y el dolor neuropático requiere de la actuación de un especialista con experiencia en este campo, de la misma forma que es fundamental unos conocimientos específicos para el tratamiento de la enfermedad inicial si esta existiera.

Es importante que el manejo del dolor crónico y neuropático sea interdisciplinar, para que el abordaje resulte completo, abarcando toda la esfera biopsicosocial del paciente. Cuando una persona tiene dolor de difícil manejo para el médico de primer contacto, debe ser enviado con los especialistas de la Clínica del Dolor donde se aborda esta enfermedad con procedimientos más específicos que mejoran la calidad de vida.

En la Clínica del Dolor hacemos uso de terapias farmacológicas y terapias intervencionistas para lograr un control adecuado del dolor y que las actividades de la vida diaria del paciente no se vean afectadas por el dolor